Y la ansiedad comió mis uñas
Cuando alguien lea este título se preguntará (o no) el por qué de la misma. Bueno, empecemos. Si hay algo que me he dado cuenta con el pasar de los días de este año 2011 es que lentamente he aprendido a leer las decisiones que he tomado como un aprendizaje. Parece un trabalenguas pero creo que funciona más o menos así, uno aprende a aprender. No digo que ya he aprendido, sino que lentamente fui incorporando las anteojos necesarios para ver errores y por lo menos entender lo que pasa en el presente. Entre ellos he aprendido de mi mismo por qué es que escribo acá. Tengo la necesidad de expresarme y si de paso alguien lo lee y le sirve mejor. Pero para mi, en primera instancia es una auto terapia.
Esta terapia no es otra cosa más que hacer lo que me gusta. Estoy casi seguro que si vos que estás leyendo estas letras te genera o mueve algo es porque te gusta también escribir. No porque uno quiera ser famoso, sino porque tenemos (no todos) un necesidad de expresarnos muy fuerte, y la canalizamos por este medio, que - aunque no seamos los mejores - nos es más amigo para hacerlo.
Hoy tengo ganas de escribir... mejor: "Ahora tengo ganas de escribir" si, no hay un por qué que lo pueda ver pero si tengo la voluntad y lo estoy haciendo, no es por una mal experiencia ni nada por el estilo. Otro descubrimiento es que me he dado cuenta que no tengo por qué estar mal para escribir, como uno no tiene por qué estar mal para ir al psicólogo, no es exclusivo de "locos". En otros momentos es la pesca, la reunión con amigos, la familia, mi mujer, el amor, ahora es la escritura.
Y, aunque no he hecho más que escribir algo muy autoreferencial acerca de la escritura te dejo que pienses y escribas lo que te parece sobre tú auto terapia. No es necesario que lo hagas en este blog. Pensalo y transmitilo, si querés.

Comentarios
Publicar un comentario